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10 diciembre 2013

DE UNA VEZ Y PARA SIEMPRE

                                                                           (c) Lumpenpoeta


La noche como un puñado de manzanas luminosas
viene a espantar atardeceres
a bailotear desnuda sobre los tinacos
a meterse
por los cables de la luz
en cada casa
y a reposar sobre los libros
como los recuerdos en mis días.

Imágenes donde eres el personaje de las horas
que se fueron como llega la mañana
y eres el día trajinando con las nubes
cuando llegas en la lluvia con tu lenguaje húmedo.
Sediento pongo un dedo a la intemperie
miro los hoteles que anuncian camas destendidas
y no estás en los besos que se quedan
como gotas en reflejo después de las tormentas.

Entonces
voy al subterráneo
a perder tu nombre en los anuncios
a dejarlo en las escaleras móviles
con los gendarmes
y las estaciones
en los torniquetes del escándalo
y los túneles en fuga.

Pero salgo a las multitudes contigo en la mirada
y encuentro mítines en las calles del conflicto
te miro en los carteles
en las mantas
ropaje clandestino de la vida.

Y cuando suena en los relojes
el comienzo de la tarde
voy a los cines de segunda
a dejarte en las butacas
a estampar tu figura en la pantalla
para que ruede en cada cuadro
a la velocidad del sueño
pero me quedo
en la esquina del insomnio.

Leo un poema a medianoche
me desabrocho la camisa
o tomo un vaso de agua
y subo a la cama a desdoblar abrazos
a caer en otros labios los besos que no te doy
mientras afuera se oyen silbatos
y perros
y gemidos.

Voy al sueño a despertar imágenes
tu
una mano
un túnel
boicoteo el paso de los trenes
camino sobre la orilla de las banquetas
tropiezo
y en el sobresalto
de tu nombre
entra la luna por el cuarto
sin pedir permiso
hasta tu foto.

Y cuando goza la luz de la mañana
el vicio de acariciar la ropa
de los tendederos desvergonzados
vuelvo a los vagones donde hombres
fornican mujeres con los ojos
y redacto la línea de un verso en el trayecto.

Alzo la vista
y te confundo con la novia
que entrega la punta
de la lengua
en otra lengua
entonces arranco el poema de su hoja
y se va con los anuncios
en aeronave de papel
a estrellarse con las letras
a quejarse del maltrato sentimental.

Subo a los peldaños
que me llevan
a los estruendos
y las prisas
tomo el lápiz y furtivo
escribo tu nombre en la pared
como declaración de olvido
de una vez
y para siempre
ante el asombro de una hormiga
que ha perdido
la línea
de su paso
y una araña la observa
inmóvil
y directa.



 (C) LUMPENPOETA

4 comentarios:

la MaLquEridA dijo...

Esto esta muy triste Poeta. Igual me gusto (no tengo acentos, sorry)


Beso




¡Ay la palabra verificadora! ¡Ay!

Karol Arcique dijo...

Qué imágenes! La ciudad, su bullicio, el cine, un viaje en metro (tenía como siete y ocho años la última vez que me subí a uno) el beso de la novia y la del final la de la araña mirando a la hormiga. Es triste, si y muy bello.

LUMPENPOETA dijo...

Gracias Malquerida por su visita a este poema de hormiga. Un poco triste, tal vez, es más bien el despojo de lo que se tiene que ir mientras se sale del túnel. Al final la hormiga se ha de haber salvado, se hizo amiga de la araña. Saludos y besos.

LUMPENPOETA dijo...

Karol, gracias, gracias por detenerte a leer estas palabras, si que fue también un viaje en metro, no había consulta para subirle el precio. Tal vez la araña ya había comido y la hormiga se fue...
Abrazo grande.