.
.

29 julio 2010

Efímera.


Por Lidia

Afuera llueve copiosamente.
Y aquí adentro también.

Hace frío. Nuevamente siento mi sangre congelada; esa misma, que no hace mucho ardía incensantemente.

Perdí la noción del tiempo.

¿Qué es el tiempo a fin de cuentas? ¿O a inicio? ¿O a intermedio?
¿El mero transcurso de instantes?

Si yo tuviera que responder, diría que es el retador del infinito.
Y el árbitro, soy yo.
Irónicamente, mi mediación desaparecerá en algún punto, y me perderé el marcador final.

Pero no hay marcador final.
En efecto, Nada fenece; Todo es un continuo devenir.

Yo soy resultado de dicha catarsis.

Mi tiempo eras tú y los demás.
Medía mi vida por momentos felices.
Y perdí la cuenta cuando tú desapareciste, llevándote a los demás, y abandonándonos a mí y a mi memoria.

Tú tan inmortal, y yo tan efímera.

26 julio 2010

El Amor de la Bailarina


Por Mara Jiménez


1,2,3,… Empezar a repetir los pasos, al principio con esfuerzo. Cada músculo en su sitio, cada tensión, cada sonrisa; subir el horizonte de la mirada, bajarlo buscando el suelo mustiamente; un paso a la vez, palpando la superficie, conociéndola con cautela para no caer y quedar rota en pedazos como una figura de yeso; conocer el ritmo y acoplarlo a los latidos del corazón, apropiárselo, y crear la vana fantasía de que soy la compositora de esta complicada sinfonía aún inconclusa; casi la poseo y me dejo poseer, abandonándome a la surte del rítmico destino; una diminuta herida de sangre, avisa del dolor inmediato que está por venir… la ignoro, hay que seguir.

4,5,6,… los pasos fluyen con maestría; soy capaz del equilibrio perfecto, aún en la punta de los pies; el raso iridiscente del triunfo cubre las viejas heridas del camino, de los ensayos interminables, agotadores y de apariencia yerma; donde estuvo la sangre hay duras carnosidades que me ayudan a seguir; soy única, irrepetible; ya no exploro el espacio, más bien lo exploto a mi placer; el delirio de la perfección me invade y todo es felicidad; surco el aire como un ser impoluto que flota entre partículas que caen pesadamente a mi alrededor. Soy omnipotente.

7,8,9, … la rutina me está matando; todos los días recorro las mismas rutas de la heroicidad: volar ya no es un privilegio si no una condición más; me aburro de los paisajes falsos de cartón pintado; no soy una mariposa, ni mucho menos un hada así que me importa un bledo competir con la ingravidez del polvo; conozco tan bien los espacios, las superficies y los rincones que podría recorrerlos con los ojos cerrados; incluso lo más excelso es susceptible de volverse hábito; todo en mi es mecánico…

Por eso me voy. No creo que haya sido amor. Yo no sirvo para eso de las relaciones duraderas.

22 julio 2010

Conjunto




por Ivanius

Búsqueda
sin convulsión.
Con ritmos propios
para(no)lelos
que vibran.

Mirada
unívoca y precisa.
Porque
de momento (uno)
es suficiente.

Habrá
quien le llame
silencio.
Resultado (sino)
de pausa entre palabras.

Atuendo
de vuelo
para (dos) sueños.

Ni propios
ni extraños.
(Nosotros)
unidos
lo sabemos.

¨Conjunto¨ Poema de Ivanius. Texto © Chanchopensante.com Imagen: Detalle de ¨La boda Arnolfini¨ por Jan Van Eyck, en Wikimedia Commmons.

19 julio 2010

De lo transversal trascendente.



Por Pelusa




Alguien me dijo una vez que la arquitectura ejercía una fuerte influencia sobre mí. No le creí. No pude creerle hasta que llegué a esta ciudad; hasta que cada piedra me confirmó que el tiempo es algo real, algo vivo, que no está delante ni detrás, sino agazapado en su transversalidad con su mirada clavada en nuestras nucas.





Imágenes tomadas en Barcelona, España (2009-10)

15 julio 2010

Suertudo

Por Canalla

Nació amoratado y sin respirar, casi muerto; con el cordón umbilical enredado al cuello, lo primero que asomó fue su pie izquierdo, mientras tragaba sangre y placenta hasta que coagularon sobre sus orificios nasales. Salió entero una hora después gracias a la pericia del médico, y en lugar de una nalgada recibió un golpe al escurrirse de su mano al suelo. Pese a esos tropiezos iniciales todavía creció unos centímetros más, explica ese galeno a los jóvenes que van al hospital e intercambian con él miradas de mutua admiración, a través del cristal del recipiente donde nada en formol.

-oooOooo-

12 julio 2010

sólo el silencio habla


Silencio.
A mi alrededor sólo silencio.
¿Lo escuchas?
Imperioso como oleaje de mar embravecido,
lacerante como el lamento más hondo.
Callada.
Irremediablemente callada.
Sin nada que decir, sin ganas de decir, sin nadie a quien decir.
Desconsolada.
En compañía de la soledad.
Inquebrantable e inapelable soledad. Siempre conmigo.
Sin hacer ruido, sin importunarme, sin inmutarse ante mi desconsuelo.
Oscuridad.
Sin visos de luz en el horizonte. La penumbra ilumina mi noche,
cuando el último cirio a tu memoria se ha consumido
y el brillo de tus ojos extinguido para siempre.
Sueños.
Mis sueños, los que me quedaron después de tu partida, dormitan para no mirar el vacio que nos envuelve, ni penar conmigo tu ausencia. Adormecen mientras yo velo su letargo, en la complicidad de las sombras, con el recuerdo de tus manos encendiendo mi cuerpo.
Sin ti.
Contigo aún dentro de mí. Tú lejos. Solo en la nada. Al cobijo de la eternidad,
insondable e indómita, como el mar que golpea la roca donde yaces…
en silencio… ¿lo escuchas?




******

08 julio 2010

Amigo





Por MauVenom


Me pareció patético que Alberto quisiera conseguirse un prostituto pero acepto que lo juzgué desde el lado prefabricado, el mundo es mercantil y él es, digamos, nada atractivo, no tiene oportunidad de conseguir el amante que busca, 'si fueras yo, entenderías', acepté su argumento pero le pedí que cortara el drama. Quería mi ayuda porque le intimidaba la situación y de confidente pasé a alcahuete, mi idea era buscar en internet pero no, él tenía localizado a un tipo que trabajaba en una calle de la Del Valle... ¿Hay prostitutos en la Colonia del Valle?. 

Alberto se quedó en el auto, yo caminé hacia su objeto de deseo que platicaba con otros dos, el tipo me sonrió pero maté su rutina, 'ni lo sueñes, no soy yo, es mi amigo que está en el carro... cuánto cobras', el tanto era más de lo planeado pero acepté, no iba a regatear en la calle, tendría que poner dinero pero estaba ahí para ayudar aún pagando por porquerías ajenas. Yo conducía y los otros dos en el asiento trasero, el prostituto, Aldo, trataba sin éxito de conversar con su cliente que moría de los nervios. Llegamos y antes de que bajaran le dije al tipo, 'si eres psicópata no mates a éste por favor', asintió prudente sin saber si mi comentario era broma, yo tampoco supe. Ahora nos reímos de eso. 

Meses después, un domingo, caminaba yo por Reforma cuando junto a mí pasó una pareja que pude haber ignorado de no ser porque él me detuvo del brazo, me miró fijamente a los ojos como si con eso yo recordara, 'Soy yo, Aldo', volteé a ver a la acompañante, una muchachita delgada y bonita, 'es mi novia, Ana... él es un amigo', comprendiendo con quien hablaba no pude evitar reírme, 'ella es tu novia y yo tu amigo', ignoró el sarcasmo y preguntó qué iba de mi vida, qué hacía ahí, cosas que no sé por que contesté. Me invitaron un café y aunque no entendí la lógica de mi presencia pronto fue evidente, sin mucha pericia en el hecho Aldo me preguntó si quería "hacerlo con ellos", en gala de estupidez repliqué 'hacer qué', mi interlocutor no dio cuenta de mi corto alcance y pensó que había un malentendido, 'no, no... pero sin dinero, así nomás por ganas'. De las diez cosas que vinieron a mi mente una fue que Aldo sí me gustaba, otra que Ana era una flaquita de cadera estrecha como esas que se me antojan a veces pero la siguiente inmediata fue Alberto que veía en Aldo a su “Primer amor In Cash” por lo que tomar la oportunidad me haría sentir culpable, entre la lealtad y la idiotez hay una línea que yo no distingo. 

Sin embargo empecé a salir con Aldo en plan camarada, había dejado la calle para tener un mejor nivel en una agencia y visitábamos bares en donde me contaba sus experiencias, jamás volvió a proponerme un encuentro sexual aunque sí dijo que le enojaba mi rechazo. Pero no, él es amor de mi mejor amigo. 

Por separado salí también con Ana, jugando a no sé qué tontería, me tomaba de la mano y llegamos a besarnos, sólo eso pues yo sabía que las cosas se volverían complicadas y no lo podría manejar. Ella es amor de mi nuevo amigo. 

En momentos de rabia me arrepiento y quiero dormir con alguno de los dos, mejor con los dos, pero el arranque acaba cuando Alberto me cuenta sus tontas ilusiones que lo hacen tan feliz. Hoy espero otro episodio como ese pero en el que  mi legalidad no estorbe. Al final envidio a Alberto con sus amantes on call, a Aldo con sus tríos, a Ana con su ligereza y realidad asumida. 

De muy joven alguien me dijo que unos nacen para vivir y los otros para contar, yo creí que mi papel sería el de intérprete de todas las historias, no, a mí me toca estar en medio, la capital fluye y vivo todo sin ser nada, dueño de una suerte inútil a la que se le atraviesa la circunstancia. Acepto mi lugar. Otros son los que atrapan y dejan caer. Yo soy el amigo... nada más. 



Derechos Registrados
Safe Creative
Edit Work: 1007086772080


Imagen: Liverpool St station
Victoria Peckham's Photostream


05 julio 2010

Donde el corazón vaya



por Paloma Zubieta López


Era lo que siempre había soñado. Mientras se vestía, sudaba profusamente y las piernas le temblaban: ¿estaría a la altura de las circunstancias? El silencio hostil no respondió. Estaba retrasado y quería darse prisa. Después de un breve calentamiento final, salió corriendo. El camino por los túneles parecía interminable; desde una multitud de gargantas la fiesta rugía cada vez más cerca. Se puso al final de la fila que avanzaba. La luz lo cegó por un momento, el latido interno era tan fuerte que lo dejó sordo. Sentía la lengua pastosa, el brazo izquierdo le dolía. Cuando llegó el silbatazo de inicio, un relámpago interior lo fulminó en medio del huracán humano. El mismo corazón que lo llevó hasta ahí se rindió ante las miles de miradas desconcertadas que lo vieron caer para no levantarse jamás.

Fotografía de © André Luiz Martins, O túnel (2007). Túnel de acceso al Estadio Maracaná, en: http://www.flickr.com/photos/almartins/1513771487

01 julio 2010

Verano Peligroso



Por Sonia.


Ski acuatico, Grapevine Lake.


Sony DSRL-A100 f/7.1 1/160 sec. ISO -100