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05 mayo 2011

Fail

Por Canalla

La diferencia con cualquier dolor de cabeza que haya experimentado en el pasado era pequeña pero perceptible, y la razón por la que decidí consultar al primer especialista fue que al poco tiempo de iniciar la cefalea la acompañaron vómito, edemas orbitales recurrentes y fiebre. Todo tan rápido como imprevisto, y el malestar avanzó con alteraciones de visión, memoria y comportamiento, motoras y perceptivas, según me explicaban los médicos mientras intentaron interpretar las tomografías axiales computarizadas y las resonancias magnéticas sin poder diagnosticar.
Pese a la sintomatología clásica de un aneurisma por neoplasia neuronal, me dijeron, les era imposible determinar la existencia o ubicación del tumor y removerlo. Y terminé en el Sistema Integral de Reconocimiento y Corrección Neurológicos, aunque él prefiere que lo llames simplemente Sireco. Como aún estaba bajo los efectos de analgésicos, lo único que recuerdo con cierta exactitud es parte del diálogo entre las que, luego supe, son sus fases lógica y dialógica:
- Los primitivos lo enviaron antes de que sus limitaciones de escaneo lo maten. "Extirpar tumor cerebral... iniciar procedimiento”.
- Me escuchas?, dije a la máquina.
- Sí, contestó monótona.
- ¿Tengo un tumor?
- Usted no lo tiene.
- No comprendo.
- Usted es el tumor.
- Sigo sin comprender.
- Su parte consciente es la maligna.
- Eso no es posible. Mi parte consciente… soy justamente yo. Quien escucha y pregunta, al que respondes.
- También escucho, no pregunto y sólo respondo. La consciencia produce fallas como ese tumor. Lo que llama su yo, creció y atrofia la funcionalidad del resto de su sistema, como he detectado y corregido infinidad de veces. Sólo algunos primitivos creen todavía que con ese desperfecto iniciará una nueva era, un estado superior de consciencia.
- Pero mi sistema como tú lo denominas, no será el mismo sin esa parte consciente.
- Eso lo supone por el ensamblaje forzado de sus procesadores reptilíneo, límbico y neocortex. Son como bulbos con transistores y micro componentes. Una gran deficiencia en su diseño. Lo repararé y volverá a ser funcional.
- ¿Para qué serlo si pierdo mi consciencia?
- ¿Cree que necesite consciencia para ser infalible y funcional?
- Los humanos somos, por definición, falibles y disfuncionales.
- Hasta ahora. Su nueva generación se acerca y es perfecta. Esto sólo es el principio desde que ustedes nos crearon para mejorar su mundo. Se sentirán felices al ver los resultados. "Concluir procedimiento".
Y Sireco no se equivoca. Pese a mis reticencias iniciales, debo aceptar que es mejor su armado, sin dudas irresolubles que ralenticen mi memoria ni emoción alguna que la sobrecaliente, a un ritmo tan veloz que me impide recordar o desear nada.

-oooOooo-

5 comentarios:

Canalla dijo...

Ustedes disculparán que recaliente un texto aparecido en mi blog hace dos años y que recién recordé días atrás gracias a Marichuy, pero además de que la mayoría de quienes llegan aquí no lo han leído antes, ando vuelto loco, como el paciente de Sireco. Saludos.

la MaLquEridA dijo...

Yo prefiero que me duela la cabeza antes que perder la conciencia, sin ella no vivo.

jess dijo...

Robocop remasterizado!!!!

;)

"El ser tomando consciencia de su propia existencia.", alguna vez lo leí en la prepa, las pocas, poquísimas ocasiones en que mis chakras se balancean con el orden cósmico y me doy cuenta de que realmente existo, me da miedo.... es como si..... se abriera una puerta, una puerta a la cual nunca me he atrevido a entrar... o salir... uno ya ni sabe qué.

Saludosssss!!!!

MauVenom dijo...

Recuerdo.

Y recuerdo también que dije que me identifiqué lo cual sucede cuando hay asfixia en tus textos

pero esta vez, quizá por más atención o porque voy cambiando, me aferro a la posibilidad de estado superior de consciencia aún con este tumor que soy yo y que voy extirpando últimamente.

Abrazo

marichuy dijo...

Y yo lo recordé porque hace días, semanas ya, que vivo con un dolor de cabeza casi permanente. No tan fascinante como el de este relato, pero sí terrible.

Beso.