por Ivanius
Todos los hombres son mortales,
pero para cada hombre su muerte es un accidente
e, incluso si la conoce y acepta, una violencia a destiempo.
Simone de Beauvoir, Una muerte tan dulce.
Hay que conmemorar a la poesía
como una nube al sol de mediodía,
que se dilata (agranda) y desvanece
refrescando la luz en lo que mira y crece.
Poesía es verbo, y nombre sustantivo,
y reflexión, y pausa, y catalejo.
También repetición, silencio y adjetivo,
y horror y honor y yerro y hierro viejo.
La poesía no consigue: sobrevive
(decía Auden). Resistiendo a la muerte
es el árbol que cae sin testigos:
aunque caiga sin sonar, se oye estridente.
Ecografías, poema de Ivanius. Texto: © Chanchopensante.com. Imagen: "Morning Fog", CC by dbking, en Wikimedia Commons.