por Ivanius
El médico dijo que acabar con el insomnio era cuestión de hábitos. Por eso cambié mi alimentación, mis actividades, incluso mi rutina en el trabajo, para ser un poco más ordenado. Tú no lo entendiste. En realidad entiendes muy poco, pero lo adivinas todo.
La falta de sueño me está convirtiendo en otra persona, pero tú jamás dices nada de mis ojeras, y siempre sabes hacerme sonreír con sólo mirarte. Tu carcajada, mitad cauta pero totalmente franca, jamás me deja indiferente.
Hablando de dejar... lo que dejé de hacer es leer, eso sí. "La cama —otra vez el doctor— no es para leer, sobre todo si quieres mejorar. Ya sabes: sólo tiene dos usos". Ahora sonrío, pero cuando yo tenía esa edad, un médico no tuteaba a un paciente que podría ser su... su tío. Tampoco haría ese tipo de chistes. O tal vez eso también es producto de la fatiga.
He aceptado todo tipo de consejos, pero cuando quiero ponerlos en práctica, tú no estás de acuerdo. ¿Por qué dormir cuando hay otras cosas que hacer, especialmente ahora que ya no leo? Y otra vez la sonrisa, y una mano en mi boca que intenta protestar, y un nuevo juguete, y una música igual de juguetona.
Me rendí, como siempre... y como siempre, la que durmió al fin fuiste tú, en mis brazos, mientras yo te miraba.
Seguramente cuando llegue mi relevo dormiré; que haga con tus juguetes lo que pueda. Con o sin consejos lo cierto es que contigo no importa (tanto) el insomnio.
"Campo de sueños", Relato de Ivanius. Texto: © Chanchopensante.com Imagen: Mexcla de Bettbezug_Helogoland, (CC_BY_SA) por Sozialutopist, y Banana_nq (PublicDomain), tomadas de Wikimedia Commons.
3 comentarios:
And as always... you left me amazed.
No cuando se esta con quien se ama...
Quizá ayude una canción de cuna, porque seguro lees de Zombies o incluso te revientas algun episodio de "The walking death" y las causas del insomnio pueden sumarse.
Un abrazo Ivanius Insomnius
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